OPINIÓN
Es la hora de quedarse
La guerra recién está comenzando, pero en Israel está nuestra historia. Nos necesita a nosotros y necesita que el mundo abra los ojos.
Por Jaime Garbarsky
Estamos en Israel con parte de nuestros hijos y familia. Estamos bien, pero mal. Es terrible lo que está pasando en Israel.
Todo empezó el sábado 7 de octubre a las 6:30 de la mañana: dispararon aproximadamente 3.000 misiles en las primeras horas para poder infiltrarse bajo ese asedio. Hoy, casi una semana después, llevan tirados más de 6.000. Se infiltraron, miles de terroristas fundamentalistas de Hamas (iguales que ISIS). Hay rehenes de Israel y secuestrados que se llevaron a gaza, entre ellos bebés, niños, ancianos y mujeres.
Las cifras de muertos se actualizan todo el tiempo. Hasta la noche del 11 de octubre, más de 1.400 personas habían sido asesinadas a sangre fría en Israel. La inmensa mayoría son civiles indefensos que fueron matados sobre sus propias camas mientras dormían o masacrados en sus propias casas.
Son más de 1.400 asesinados que, dicen, pueden llegar a ser 2.000. Son más de 3.000 heridos, el 10% de ellos de extrema gravedad. Asesinaron más de 260 (doscientos sesenta) jóvenes que estaban en un recital en el desierto. Hicieron una cacería como en un coto de caza, quemaron vivas a familias enteras y ejecutaron otras.
El número de rehenes no se ha oficializado, pero puede sumar mucho más de unas centenas. Y todavía quedan extremistas escondidos que el ejército está tratando de encontrarlos y eliminarlos. Ya hay más de 1.000 de ellos muertos en estos combates. El lugar donde lo hicieron fueron poblados o granjas colectivas (kibutz) en pleno desierto, zonas rurales. Gente tranquila como si fuera zonas rurales Argentinas.
La guerra recién está comenzando: Israel está tratando de destruir a Hamas y rescatar a los rehenes. Todos de ellos deben preferir estar muertos antes de en las manos de Hamas. Imaginen lo que les están haciendo.
Van a morir muchos civiles de ambos lados, pero la mayor responsabilidad es de occidente y los musulmanes normales que no han podido o querido involucrarse durante años y extirpar, aniquilar (sí, aniquilar) a estos grupos. Incluidos el régimen teocrático de Irán.
Hoy hay un nuevo eje geopolítico del mal: China, Rusia e Irán. Israel es la única democracia en Medio Oriente y una de las únicas democracias reales y plenas del mundo.
Israel ha movilizado a su reserva más de 360.000 soldados jóvenes de 21 a 40 años, el 80% de ellos personas con estudios terciarios y universitarios. ¿Se entiende quiénes son nuestros soldados? Somos todos nosotros, personas normales, instruidas, pacíficas.
Israel está totalmente parado en sus actividades normales, no hay gente en las calles, falta personal para actividades críticas. Están todos movilizados y preparándose en todos los frentes. Parte en gaza (la gran mayoría), muchos en la frontera con el Líbano en riesgo de hezbollah (Irán ha tomado parte del territorio allí) y también atentos a la situación de mantener la tranquilidad de Palestina en lo que se conoce como Cisjordania. D’S nos proteja para poder terminar esto fortalecidos con la menor cantidad de muertos inocentes de todos lados.
¡Me quedo! Este es el momento de quedarse, no de irse. Tengo dos hijos y una nieta acá, y no es ni más ni menos que quedarse y ayudar, aunque sea dando ánimo a la gente de mi pueblo, mi Nación y también mi Estado.
Es nuestra historia, el único pueblo de la antigüedad, la inquisición, los progromos de los zares, el holocausto, la Shoa y ahora la defensa del estado que nos permite a todos decir que somos Judíos.
Nuestro pueblo nos necesita a nosotros y necesita que el mundo abra los ojos. Tarde o temprano les termina pasando lo mismo a todos.
Esta es una guerra religiosa del mundo musulmán fundamentalista contra el mundo occidental y judeo/cristiano.
Gracias por la preocupación, la comprendo. Pero es la hora de quedarse. De esto, con mucho dolor, también saldremos fortalecidos.