Te extraño
Ay viejo querido...si estuvieras aquí... Creo yo que las cosas serían tan diferentes... que las personas coincidirían con vos y marcharían por el buen camino, hacia donde siempre apuntabas... Pá, las cosas y la gente han cambiado y no justamente para bien, no justamente fijando horizontes claros. Es duro el hoy sin vos, es duro el mañana sin vos, es muy duro el camino sin vos, pero creo que por algo, Dios que es sabio, te llevó antes de tiempo...creo que por algo lo hizo. Pero sigo insistiendo que "te extraño" y que me extraño cada día que pasa de todo y de todos, en el actuar, en el pensar y en el brutal cambio que fue el "antes y después de tu estadía aquí". No se toma dimensión del amor, de la fraternidad, de la honestidad, de la soberbia, de la arrogancia, del poder, de toda la mezcla de sabores dulces amargos que se puedan cruzar por mi cabeza hoy. Estoy triste, muy, pero fuerte, muy fuerte, porque si algo me enseñaste en este mundo, es que la gente no se mide por lo que tiene o desea cada vez más materialmente, sino por lo que es como persona, que es lo que dejamos al irnos. Dejamos nada más y nada menos lo que fuimos, como fuimos y esa gran huella que hicimos. Hoy pensaba no escribirte y dejar pasar este día, no se por qué...pero me arrepentí y unas ganas de gritar en mi alma, "te extraño viejo" me invadieron y por eso me salió lo que me salió esto, como siempre del corazón y esta vez muy acompañada de la razón. Y me despido con esta frase de Albert Einstein... “Comienza a manifestarse la madurez cuando sentimos que nuestra preocupación es mayor por los demás que por nosotros mismos”. Hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana. Y del universo no estoy seguro. A tres años y un mes de tu partida, te grito a los cuatro vientos.....te extraño papi querido!!! Sé que me cuidás y me ayudás, lo sé. Te llevo dentro de mi eternamente. Tu hija Celia 05-11-09
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