Arquitectos destacan sanción de una Ley
El pasado martes el Senado convirtió en ley un proyecto que deroga disposiciones de la Ley 8622, por el que los honorarios y aranceles profesionales recobrarán su carácter de orden público.
En diálogo con APFDigital, la presidenta del Colegio de Arquitectos de Entre Ríos (Caper), Mariana Melhem, destacó la importancia del cambio de legislación al señalar que “recuperamos soberanía”. Los senadores le dieron sanción definitiva el martes pasado al proyecto de ley que deroga, “las disposiciones de la Ley 8.622 en relación a las leyes regulatorias de honorarios y aranceles profesionales, las que recuperan a partir de esta fecha su carácter de Orden Público”.
El texto, que fue girado al Ejecutivo para su promulgación, establece que “cada institución con administración de matrícula profesional, adecuará y/o adoptará el régimen de aranceles y honorarios en consonancia con las presentes disposiciones”.
“Recuperamos soberanía de alguna manera, que es algo que habíamos perdido porque otro había dispuesto que adhiriéramos a una ley nacional, en donde quedamos expuestos al juego de la competencia y solamente desde el punto de vista del valor del honorario y no considerando el potencial que tiene contratar a un arquitecto”, expresó a esta Agencia la presidenta del CAPER, Mariana Melhem.
“Uno podía cobrar lo que quisiera entonces valía lo mismo el que cobraba un peso que el que cobraba cinco”, agregó, al tiempo que consideró que “si se tiene un reconocimiento respecto de los honorarios y se piensa en los honorarios mínimos, es un conjunto de puertas que se reabren”.
En el mismo sentido, la presidenta del CAPER aseguró: “Acá la competencia ya se centra en otras cuestiones, se centra en la calidad”.
Además, indicó que “el hecho de que te desregulen totalmente el honorario era una especie de desvalorización y todos los profesionales hemos pasado por la universidad y se supone que tenemos una formación primero que aventaja a nuestros clientes y segundo que amerita tener un cobro que sea justo desde el punto de vista del sostén”.
El texto, que fue girado al Ejecutivo para su promulgación, establece que “cada institución con administración de matrícula profesional, adecuará y/o adoptará el régimen de aranceles y honorarios en consonancia con las presentes disposiciones”.
“Recuperamos soberanía de alguna manera, que es algo que habíamos perdido porque otro había dispuesto que adhiriéramos a una ley nacional, en donde quedamos expuestos al juego de la competencia y solamente desde el punto de vista del valor del honorario y no considerando el potencial que tiene contratar a un arquitecto”, expresó a esta Agencia la presidenta del CAPER, Mariana Melhem.
“Uno podía cobrar lo que quisiera entonces valía lo mismo el que cobraba un peso que el que cobraba cinco”, agregó, al tiempo que consideró que “si se tiene un reconocimiento respecto de los honorarios y se piensa en los honorarios mínimos, es un conjunto de puertas que se reabren”.
En el mismo sentido, la presidenta del CAPER aseguró: “Acá la competencia ya se centra en otras cuestiones, se centra en la calidad”.
Además, indicó que “el hecho de que te desregulen totalmente el honorario era una especie de desvalorización y todos los profesionales hemos pasado por la universidad y se supone que tenemos una formación primero que aventaja a nuestros clientes y segundo que amerita tener un cobro que sea justo desde el punto de vista del sostén”.
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