En una semana se conocerá el adelanto de veredicto contra Jara

Una sola audiencia bastó para la presentación de pruebas y testimonios en contra de Luciano Jara, un delincuente con antecedentes penales, de 27 años, que fue juzgado a fines de esta semana por un “robo doblemente agravado por ser cometido con armas y en poblado y en banda cometido en carácter de coautor”, y un hecho de “encubrimiento”.

En el debate no se discutió la existencia del principal hecho que se le acusa, sino si fue uno de los tres delincuentes que en las primeras horas de la madrugada del 18 de abril asaltaron a una pareja de adolescentes que caminaban por calles Saravi y España. Según el hecho denunciado, los interceptaron para apoderarse del teléfono celular de la joven de 17 años, pero para lograrlo se le imputa a Jara que le colocó un cuchillo en el cuello al adolescente de 15 años que la acompañaba, con el fin de que la chica entregara el aparato.

El otro caso que se le imputa es el “haber adquirido y/o recepcionado a sabiendas de su procedencia ilícita” una bicicleta que le sustrajeron a un niño que realizaba actividades físicas con su colegio en las inmediaciones del corsódromo, que fue hallada durante el allanamiento que realizó la Policía en su domicilio del barrio Trinidad cuando lo fueron a detener por el robo a los adolescentes.

A Jara le dictaron una prisión preventiva, que luego se la extendieron por 30 días. Pero posteriormente a ello, y como la causa ya estaba bajo la órbita de la sala Penal de Juicios de Gualeguaychú, el vocal del tribunal, Arturo Dumón, lo benefició con una prisión domiciliaria hasta que se realizara el juicio que en principio estaba programado para el 9 y 10 de septiembre. Pero, como en algunas ocasiones ocurre, el imputado evadió la medida y estuvo prófugo por casi un mes, hasta que volvieron a localizarlo y detenerlo nuevamente.

Fue durante una de estas audiencias en los Tribunales de Gualeguaychú, para confirmar y prorrogar las medidas preventivas por considerar que existía riesgo procesal, que Jara en un ataque de ira arremetió contra uno de los vidrios de la puerta de acceso al edificio, sobre calle Sáenz Peña. Actualmente, y luego de ser detenido por segunda vez por evadir la domiciliaria, el delincuente está alojado en Jefatura Departamental, una medida que el juez Caprarulo le extendió hasta la lectura del adelanto de veredicto del próximo 11 de noviembre.