En un acto vandálico rompieron vidrios en la Escuela Rocamora
Ayer a la mañana el equipo directivo de la Escuela Rocamora, se encontró con una triste y desagradable sorpresa.
Debido al accionar de inadaptados sociales, que no tienen ningún respeto por las instituciones educativas de nuestra ciudad, en horas de la madrugada del domingo rompieron al menos 15 vidrios de la Escuela Rocamora, las ventanas de la salas de jardín de Infantes de 4 y 5 años, que dan a calle Andrade y dos abertura de las aulas que dan a calle Ayacucho también sufrieron daños.
En la rotura de los vidrios, solo hubo intenciones de hacer daño a una institución que albergó en sus aulas a decenas de generaciones de gualeguaychuenses. No hubo intenciones de romper los vidrios para robar, porque todas las ventanas donde se dañaron los cristales, cuentan con rejas, lo que habría sido imposible ingresar por esas ventanas, sin cortar los barrotes de las rejas .
Para la escuela será un gasto extra que tendrá que afrontar antes de que comiencen las clases, en momentos, en que el viejo edificio de más de 120 años de historia tiene un alto costo de mantenimiento por su deterioro. Los recursos para atender las emergencias inmediatas, se suelen sacar de lo que recauda la Cooperadora de la Escuela y el trabajo de los padres de los alumnos que en varias oportunidades ofrecieron su tiempo para pintar las aulas.
Hace algunos años a tras la fachada de la escuela fue pintada en su totalidad, pero al poco tiempo comenzaron a aparecer grafitis con aerosol en las paredes de las calles Andrade y Ayacucho.
En la rotura de los vidrios, solo hubo intenciones de hacer daño a una institución que albergó en sus aulas a decenas de generaciones de gualeguaychuenses. No hubo intenciones de romper los vidrios para robar, porque todas las ventanas donde se dañaron los cristales, cuentan con rejas, lo que habría sido imposible ingresar por esas ventanas, sin cortar los barrotes de las rejas .
Para la escuela será un gasto extra que tendrá que afrontar antes de que comiencen las clases, en momentos, en que el viejo edificio de más de 120 años de historia tiene un alto costo de mantenimiento por su deterioro. Los recursos para atender las emergencias inmediatas, se suelen sacar de lo que recauda la Cooperadora de la Escuela y el trabajo de los padres de los alumnos que en varias oportunidades ofrecieron su tiempo para pintar las aulas.
Hace algunos años a tras la fachada de la escuela fue pintada en su totalidad, pero al poco tiempo comenzaron a aparecer grafitis con aerosol en las paredes de las calles Andrade y Ayacucho.
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