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Diario El Argentinoviernes 26 de abril de 2024
Policiales

Condenado a un año y dos meses de cárcel por reiterados hurtos y violación de domicilio

Condenado a un año y dos meses de cárcel  por reiterados hurtos y violación de domicilio

El viernes 10 de mayo se condenó a Miguel Ángel Villarreal (de 50 años, con antecedentes), a la pena de un año y dos meses de prisión de efectivo cumplimiento, por los delitos de robo simple en grado de tentativa, encubrimiento de cosa cuya procedencia ilícita pudo haber sido sospechada por el autor, hurto simple (cinco hechos, tres de ellos en grado de tentativa) y violación de domicilio (cinco hechos).

Asimismo, el 14 de abril Villarreal había sido condenado a ocho meses de prisión de efectivo cumplimiento, por los delitos de hurto simple, violación de domicilio en grando de tentativa y amenazas simples, aunque se mantuvo la sanción única de un año y dos meses de prisión dictada el viernes pasado. Además, se lo declaró reincidente.

Como el fiscal Facundo Álvarez y el defensor oficial renunciaron ante el juez de Garantías y Transición N° 1, Tobías Podestá, a los plazos de impugnación, la sentencia adquirió firmeza y desde el viernes pasado, Villarreal quedó en prisión, en principio, en la Unidad Penal Nº 9 Granja El Potrero.

El defensor oficial había solicitado que su asistido cumpla la pena en la Unidad Penal Nº 4 de Concepción del Uruguay, pero el juez Podestá lo dejó a criterio del Juzgado de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad de la jurisdicción.

Primer hecho

Según el orden dado en la sentencia; en fecha y horario sin poder precisarse aún, pero con posterioridad al 31 de marzo pasado a las 13:30 aproximadamente, y con anterioridad a las 18:40; Villarreal recibió una carretilla de fabricación casera, hecha con un cuadro y ruedas de hormigonera y un tacho de plástico color azul, cortado a la mitad; pudiendo él mismo -por las circunstancias del caso-, haber sospechado de su procedencia ilícita.

Este elemento fue denunciado como sustraído el 1º de abril en sede policial. De acuerdo a esa denuncia, la víctima se encontraba en el interior de su domicilio de calle La Cantera al 700, más precisamente en el patio; habiendo constatado la faltante de la carretilla; que luego sería secuestrada en cercanías del lugar, más precisamente en un baldío ubicado a pocos metros de la intersección de Asisclo Méndez y Gutiérrez, minutos posteriores a las 20:40 del 1º de abril.

El imputado había sido observado por personal policial horas antes, en cercanías al lugar del hallazgo, cuando se conducía con la referida carretilla, empujándola desde atrás, e ingresando al puente peatonal de color amarillo, que une la calle Asisclo Méndez y el Barrio Don Pablo.

Segundo hecho

El 1º de abril, aproximadamente a las 20:40, Villarreal ingresó a la obra en construcción de calle Goldaracena, entre Asisclo Méndez y La Cantera, y se apoderó ilegítimamente de diversos elementos, a saber: cuatro bolsas y media de cal, dos bolsas de cemento, un balde de ceresita marca Impersol, cuatro reglas de tres metros de largo, una regla de aproximadamente 2,5 metros de largo, un tubo de PVC, un codo a 45º de PVC, un nylon de 5 por 7 metros de color negro para impermeabilizar el piso, medio rollo de caño corrugado color blanco, una bolsa con varios elementos en su interior, entre ellos, conectores de electricidad y desagüe, una caja de luz y un rollo de alambra de fardo de un kilo. Este accionar quedó trunco por circunstancias ajenas a su voluntad, al advertir en las inmediaciones la presencia policial, ante lo cual se dio a la fuga.

Fue en esa maniobra que ingresó, ingresando al domicilio del propietario de la obra, contra su voluntad presunta, siendo allí aprehendido por personal policial.

Tercer hecho

El 26 de febrero pasado, aproximadamente a las 20, Villarreal, previo ingresar por un portón corredizo que se encontraba sin medidas de seguridad al patio lateral de un domicilio ubicado en calle Pasteur al 20, contra la voluntad presunta de su propietario y ejerciendo fuerza sobre la persiana de una de las ventanas laterales, intentó apoderarse ilegítimamente de al menos una caja con parlantes, a la cual había arrollado su cable y trasladado cerca de la referida ventana.

Además, había dejado sobre la pared un palo de madera, con el cual habría ejercido la fuerza sobre la persiana; accionar que no logró consumar por circunstancias ajenas a su voluntad, al advertir la presencia de un vecino del lugar, quien minutos antes lo había visto en el interior del patio y lo interceptó y posteriormente lo redujo, dando inmediato aviso a la policía, la que arribó a la brevedad.

Cuarto hecho

El 19 de diciembre de 2018, aproximadamente a las 8, Villarreal, previo ingresar a un pasillo que conduce a un departamento ubicado en calle Fray Mocho, casi Cervantes, contra la voluntad presunta de su propietario, se apoderó ilegítimamente de una bicicleta todo terreno de mujer, que se encontraba allí sin medidas de seguridad.

Esta vez, sin ejercer fuerza en las cosas, ni violencia sobre persona alguna, se dio luego a la fuga con el botín mal habido en su poder, dejando frente al domicilio del damnificado otra bicicleta, tipo playera, en la que se conducía y había llegado al lugar.

Finalmente, fue aprehendido por personal policial a unas cuadras, más precisamente sobre calle Juan José Franco, a metros de su intersección con Primera Junta, circulando con el rodado sustraído.

Quinto hecho

El 7 de diciembre de 2018, aproximadamente a las 16: 45, ingresó a un domicilio de calle Ramírez al 300, sin el consentimiento expreso o presunto de su propietario. Una vez en el lugar, intentó apoderarse ilegítimamente -sin ejercer fuerza sobre las cosas o violencia sobre las personas-, de un rollo de cables pertenecientes a la instalación eléctrica de un vehículo, los cuales estaban en un pasillo. Pero, fue sorprendido por un vecino al momento en que salía de esa propiedad.

Sexto hecho

El 25 de noviembre del año pasado, aproximadamente a las 7:30, Villarreal ingresó al complejo de bungalows Weekend, ubicado en el bulevar Regatas, sin el consentimiento expreso ni presunto de su propietario. Allí se dirigió hasta la parte trasera del bungalow Nº 12 y se apoderó ilegítimamente -sin ejercer fuerza en las cosas-, de una garrafa de 10 kilos.

Séptimo hecho

El 22 de marzo de 2019, aproximadamente a las 17, ingresó sin autorización expresa ni presunta de su propietario a una casa ubicada en Maestra Torrilla al 2.400, y sin ejercer fuerza ni violencia sustrajo un balde de plástico y dos motores correspondientes a una máquina hormigonera, sin llegar a consumar el desapoderamiento al haber sido sorprendido “in fraganti” por el propietario del lugar.

Octavo hecho

El 9 de mayo pasado, aproximadamente a las 10:40, ingresó sin autorización expresa ni presunta de su moradora y denunciante, a una propiedad de calle Concordia al 600, previo escalar un tapial de aproximadamente 1,72 metros de altura. Allí intentó apoderarse ilegítimamente de un sillón tipo reposera y de un machete de unos 60 centímetros de largo.

Este accionar no lo pudo consumar por causas ajenas a su voluntad, al ser sorprendido en el patio de la vivienda, y posteriormente aprehendido por un funcionario policial que había sido alertado.

Noveno hecho

Por este hecho se lo juzgó y condenó en la audiencia del martes 14 de mayo. Se trata del hecho registrado el 26 de abril pasado, cuando aproximadamente a las 9:30, Villarreal ingresó sin el consentimiento expreso ni presunto de su propietaria a un domicilio de calle Las Rosas al 2.700, e intentó apoderarse ilegítimamente de una garrafa de 10 kilos.

Este accionar no lo pudo concretar por causas ajenas a su voluntad, al ser sorprendido por personal policial que había sido alertado por un vecino. Cuando los uniformados llegaron al lugar, lo encontraron con el botín en su poder. Al ser aprehendido, Villarreal le dijo al funcionario policial Álvaro Jamen, con ánimo de infundirle temor, “ya te voy a encontrar en la calle a vos, sin las esposas, te voy a cagar bien a trompadas”.

Por último, el juez Podestá ordenó que se proceda de conformidad con el Artículo 11° bis de la Ley 24.660 (incorporado por Ley N° 27.375), es decir, que cuando corresponda se cite a las víctimas de los hechos para que opinen sobre la posibilidad de que Villarreal acceda a algún instituto del régimen de ejecución penal.

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