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Las provincias protegen sus árboles con programas de cultivo, reforestación y georreferencia
Con la producción y plantación de diferentes especies nativas propias de cada región, las provincias implementan programas de protección del arbolado público y reforestación de la vegetación autóctona para cuidar el ambiente y fortalecer la conservación de la biodiversidad.
Miles de árboles y plantas son colocados anualmente en distritos que implementan políticas públicas para la conservación de especies vegetales, además de leyes que declaran de "dominio provincial" a los bosques nativos, y programas de fomento y financiación que involucran a escuelas, cooperativas y organizaciones civiles.
Argentina cuenta con 536.545 kilómetros cuadrados de bosques nativos, lo que representa el 19,2 % de la superficie continental del país, según datos del Ministerio de Ambiente nacional, y las provincias con mayores extensiones son Santiago del Estero, Salta, Chaco y Formosa correspondientes al Parque Chaqueño.
En la provincia de Buenos Aires, el Ministerio de Ambiente desarrolla el Plan Nativas Bonaerenses con la producción y plantación de 200.000 ejemplares nativos, y la recuperación de bosques nativos y áreas naturales protegidas.
En abril, la Gobernación lanzó el Plan de Impulso a la Actividad Forestal (PIAF 2022), que incluye la entrega de especies a escuelas rurales, insumos y ayuda económica para productores, con el objetivo de crear nuevos puestos de trabajo y cuidar el ambiente.
La iniciativa distribuyó 210.000 estacas de álamos y sauces, 50.000 plantines de eucaliptos, 10.000 acacias blancas y 10.000 casuarinas, junto con una línea de financiamiento específica de hasta 150 mil pesos para afrontar los costos de plantación.
La biofábrica forestal del Ministerio de Desarrollo Agrario cultiva tejidos vegetales in vitro lo que permite la multiplicación de plantas forestales de alta calidad genética y libres de enfermedades lo que permitirá triplicar la producción de plantines de las estaciones forestales, que se destinan a la producción maderera, protección de cultivos y ganado, bosques urbanos o restauración de paisajes.
La provincia a la vez otorga financiamiento para insumos, busca fortalecer los viveros forestales municipales, genera materiales de divulgación para las comunas y el público en general, mientras el Programa de Apoyo a la Gestión del Riesgo y las Emergencias en Bosques Urbanos asiste a los municipios ante eventos meteorológicos que impacten sobre los bosques urbanos.
En el partido de General Pueyrredón, en tanto, comenzó en marzo una campaña de reforestación donde se han plantado más de 4 mil árboles en 33 barrios en un programa surgido en en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sustentable de Naciones Unidas que considera que la forestación y reforestación son acciones indispensables para mitigar el cambio climático.
El presidente del Ente Municipal de Servicios Urbanos, Sebastián D'Andrea, recordó que ese distrito "recorre más de 1.400 kilómetros cuadrados y posee una gran masa forestal de características muy heterogéneas" que genera "múltiples beneficios, no solo desde lo paisajístico, sino como actores relevantes en la lucha contra el cambio climático, como reguladores de temperatura y vientos, como pulmones del planeta".
Y en Bahía Blanca, el Concejo Deliberante aprobó el Plan Director y Regulador de Arbolado Urbano, que establece "las especies recomendadas" para el distrito y "describe la metodología de trabajo para un período de 5 años en cuanto a manejos silviculturales o requerimiento de plantaciones".
La ciudad también desarrolla un "censo de arbolado urbano junto con alumnos de Agronomía de la Universidad Nacional del Sur".
En Santa Fe rige la ley provincial 13.836/2019, que establece una política de Estado en materia ambiental a través de la promoción y la conservación del arbolado y que obliga a los municipios a elaborar un Plan de Gestión Integral del Arbolado Público.
En ese marco, la ciudad de Santa Fe prevé plantar un mínimo de 3.000 árboles este año y puso en marcha el programa "Sumamos Verde" para generar corredores verdes en articulación con las iniciativas ciudadanas que propongan plantaciones.
En Córdoba, la secretaría de Ambiente aprobó en mayo el Plan Estratégico de Bosques Nativos que adopta el manejo forestal sustentable de las cuencas, restauración de bosques degradados, prevención de incendios forestales y el uso sustentable de la biodiversidad y fortalecimiento de las áreas de conservación.
Además, en abril implementó el programa "forestando Córdoba", que consiste en una plataforma digital para el censo y geolocalización de cada árbol que crece en los pueblos y ciudades, con el objetivo de generar un mapa del arbolado existente en la provincia.
Con esa herramienta se apunta a obtener la información referida a las diversas especies de cada zona, posibilitando de esa manera gestión y las intervenciones sobre los ejemplares, además de profundizar las tareas de educación ambiental.
En Jujuy, desde abril de 2021, el Ministerio de Ambiente local encara un plan de "Fomento al Verde Urbano", que apunta a incorporar arbolado en municipios de todas las ecorregiones de la provincia, especialmente con árboles nativos.
El trabajo suma a escuelas, organizaciones civiles y dependencias del Estado, como la Secretaría de Seguridad Vial que armó un minibosque en homenaje a víctimas de incidentes viales.
"Lo que buscamos es que las acciones sean transversales a otros organismos y tengan más que un sentido ambiental", comentó a Télam, la Secretaría de Biodiversidad local, Estefanía Sánchez Cuartielles, y detalló que en el sur provincial se plantan lapachos y tipas, y hacia el norte especies como el molle.
La funcionaria dijo que también se trabaja en la restauración forestal con "un programa piloto con la Dirección de Bosques de Nación que abarca cinco áreas degradadas", que se encuentra próximo a su etapa de monitoreo y destacó el trabajo de enriquecimiento de bosques con especies que son muy utilizadas por el sector forestal en la provincia, como cedro, quina y lapacho; además de la protección del roble criollo, una especie de las Yungas en peligro de extinción.
Mendoza, por su parte, anunció que lanzará un sistema de gestión digital del arbolado público en los municipios del área metropolitana, para lo cual comenzó un ciclo de capacitaciones en gestión del sistema.
"Este ambicioso proyecto del Gobierno de Mendoza a través del Unicipio (conformado por lo municipios del área metropolitana), que venimos gestando desde hace varios años, marca un antes y un después en materia de gestión del arbolado público metropolitano, el bosque urbano más extenso del país", acotó el secretario de Ambiente de la provincia, Humberto Mingorance.
Para ello, los equipos técnicos de los siete municipios metropolitanos que integran el municipio serán capacitados en el uso y manejo de la plataforma de gestión digital de Mi Árbol Mendoza, un completo sistema de información georreferenciada de cada uno de los ejemplares forestales de las calles de toda el Área Metropolitana.
En Chubut, el artículo 105 de la Constitución provincial indica que "el bosque nativo es de dominio de la provincia" y establece el compromiso de "su aprovechamiento, defensa, mejoramiento y ampliación" para lo cual la Provincia se reserva las facultades inherentes al poder de policía.
Además de la ley específica que establece el manejo del recurso "bosque" a nivel provincial, la mayoría de las municipalidades cuenta con ordenanzas de cuidado del arbolado público como Trelew, que tiene vigente desde hace más de 25 años la ordenanza denominada "Tre-verde" que entre otras cosas prohíbe a los frentistas sacar árboles de la vía pública sin previa autorización de la autoridad competente.
El Gobierno de San Luis, lanzó a principios de junio el Plan Forestal "Más Árboles, Más Vida" para plantar y conservar un millón de árboles en toda la provincia, a través de alianzas estratégicas con los distintos actores de la sociedad, y generar corredores biológicos en rutas y caminos, para la conservación de la biodiversidad de la flora y fauna provincial.
Asimismo, apunta a la restauración de cuencas con problemas erosivos, como ocurre en el Morro, en el norte provincial; recuperar bosques nativos que fueron destruidos por los incendios forestales; crear filtros verdes en plantas de tratamientos de efluentes cloacales; generar bosques urbanos y generar cortinas forestales en instituciones públicas como privadas.
Para participar del proyecto de forestación, las personas o instituciones deben registrarse en una página web, para luego poder hacer entrega de la especie que se adecue a la zona geográfica y se hará un monitoreo constante para georreferenciar cada árbol colocado a través del GPS.
En Neuquén, los viveros de la provincia y la Legislatura impulsaron el proyecto "Ciudades más verdes" que comprende la asistencia de 25.000 árboles y plantas que se distribuirán en 21 comisiones de fomento y ocho municipios, dijeron fuentes de la Subsecretaría de Prensa del Gobierno provincial.
También se realizan "Tareas de remediación", tras el incendio generado por una tormenta eléctrica a fines de 2021 en Quillén, cerca de Aluminé, que afectó a 7.800 hectáreas de bosque nativo, especialmente ñire y araucaria.
En tanto, el Parque Nacional Lanín lleva adelante un programa de restauración y conservación de la araucaria araucana, una especie única que crece en la provincia y en la región de la Araucanía, en Chile, mientras el proyecto Pehuén permitirá que en la próxima primavera culmine la etapa de plantación de 9.000 araucarias provenientes de viveros del PNL y de las comunidades mapuches Puel y Aigo.
En Salta, 1.700 alumnos de quinto grado de 22 escuelas de la capital provincial protagonizaron recientemente el acto de promesa para comprometerse a realizar diversas acciones de cuidados y concientización para convertirse en promotores ambientales y en ese marco recibieron árboles para sus instituciones.
Fuentes municipales informaron que la actividad, en el microestadio Delmi, requirió de una capacitación previa de los alumnos que efectuaron la promesa ambiental, en talleres de reciclaje, forestación y el uso eficiente de energía, agua y gas.