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La Justicia Federal prohíbe el ingreso de un crucero al puerto de Mar del Plata
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La fiscalía federal marplatense y el intendente Guillermo Montenegro habían solicitado que se negara la entrada al puerto de la ciudad al crucero MV Ushuaia, ya que se sospecha que uno de los tripulantes presenta síntomas de coronavirus.
El juez federal de Mar del Plata Santiago Inchausti prohibió este miércoles el ingreso al puerto local de un crucero proveniente de Ushuaia, hasta que no se establezca con precisión el estado de salud de sus tripulantes en el marco de la emergencia sanitaria por el coronavirus, informaron fuentes judiciales.
La resolución se dio en línea con un pedido de la fiscalía federal de la ciudad y del intendente Guillermo Montenegro ante el desplazamiento del buque turístico que salió de Tierra del Fuego a las 17 del sábado 20 de marzo, cuando ya regía el decreto nacional que impuso la cuarentena obligatoria.
El magistrado dispuso que el buque MV Ushuaia no amarre en la terminal marítima marplatense hasta que la autoridad sanitaria realice un amplio informe sobre el estado de salud de los tripulantes, luego de que dos de ellos presentaran a bordo síntomas compatibles con la enfermedad, el 22 de marzo.
En su resolución, a la que tuvo acceso Télam, el magistrado hizo lugar a una medida cautelar presentada el martes por el fiscal general federal, Daniel Adler, para que "se prohíba el ingreso" del crucero al Puerto, previsto para el 4 de abril.
El juez pidió además como medida preventiva un informe a la Prefectura Naval que deberá adjuntar por un lado "toda la documentación respaldatoria con relación a la autorización" del barco para dejar el Puerto de Ushuaia el 20 de marzo, el mismo día en que entró en vigencia la cuarentena dispuesta por el Gobierno nacional.
Asimismo, la autoridad portuaria deberá relevar si alguno de los tripulantes "que aún continúan a bordo del buque han bajado a tierra en el puerto de Ushuaia" el día de la zarpada y si alguno de los 76 pasajeros y tres tripulantes que lo hicieron "presentó antecedentes epidemiológicos".
El juez pidió también que se remitan "todas las comunicaciones realizadas por el buque", de bandera togolesa, "a las autoridades marítimas y terrestres", y que se informe "los movimientos de la totalidad de los tripulantes" a la Dirección Nacional de Migraciones.
En línea con la presentación realizada por la fiscalía federal, el juez Inchausti dispuso que si investigue si el barco pudo "haber incumplido con las reglamentaciones en materia sanitaria dispuestas por el Poder Ejecutivo", en el marco del decreto que estableció el aislamiento social preventivo y obligatorio, que entró en vigencia a las 0 del día que la embarcación dejó el puerto fueguino.
El magistrado subrayó que, según la normativa, "la única excepción" de navegación según esa disposición "era la actividad de pesca", mientras que el MV Ushuaia es un crucero de paseo, y partió a las 17.
"A ello debe sumarse que en el buque se encontraban personas de distintas nacionalidades, por lo cual los miembros de la tripulación que aún continúan embarcados tuvieron contactos con personas de países declarados como zonas de riesgo por el virus Covid-19 para aquella fecha, por ejemplo China, Estados Unidos y España", aseguró.
A partir de esta medida, Sanidad de Fronteras deberá realizar "un amplio informe" sobre la situación sanitaria del personal embarcado, y en base a ello, la "fecha estimada en la que podrían desembarcar".
Además, Prefectura tendrá que realizar "un informe diario sobre el estado de salud de los tripulantes, condiciones del buque, necesidad de suministros y toda otra cuestión de interés".