A puro coraje
Las dirigidas por Germán Portanova cosecharon el tercer punto en la historia de las Copas del Mundo.
Argentina se presentó en el Dunedin Stadium con la ilusión de sumar su primera victoria de la historia en un Mundial femenino. No lo consiguió, pero vaya que sus representantes dejaron el corazón. La Albiceleste igualó 2-2 con Sudáfrica tras remontar un 0-2. Y mereció más en el epílogo, en el que buscó con el último aliento, un triunfo que la acomodara en el Grupo G de la Copa del Mundo de Nueva Zelanda-Australia.