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Colombia tendrá a una mujer como vicepresidenta y esta vez será afro
La ambientalista Francia Márquez acompaña a Gustavo Petro, mientras que la académica Marelen Castillo secunda la fórmula que encabeza Rodolfo Hernández. Tienen apenas dos coincidencias: las raíces afro y sus deseos de suceder a la actual vice, Marta Lucía Ramírez, la primera colombiana en ser número dos del país.
Una mujer asumirá en la primera semana de agosto como vicepresidenta de Colombia, un hecho que se dio solo una vez en la historia del país y que ahora buscan protagonizar la ambientalista Francia Márquez y la académica Marelen Castillo, con historias, perfiles y características muy diferentes.
Probablemente Márquez y Castillo tengan apenas dos coincidencias: las raíces afro y sus deseos de suceder a la actual vice, Marta Lucía Ramírez, la primera colombiana en ser número dos del país.
Pero la decisión de Gustavo Petro y Rodolfo Hernández de elegir a estas dos mujeres como sus escoltas de binomio pareció responder, además de a los cambios sociales de los últimos años, a un doble objetivo de reforzar el vínculo con esa parte del electorado que, a priori, ya tenía decidido el apoyo y, a la vez, sumar a otros sectores.
"Para entender sus fórmulas es importante entender qué cambio representa cada uno de ellos. Y cada una, Márquez y Castillo, tienen su punto de anclaje en un sector del electorado", evaluó para Télam el sociólogo Alexander Gamba, maestro en Estudios Latinoamericanos y docente de la Facultad de Sociología de la Universidad Santo Tomás.
Entre las dos candidatas a vice hay una diferencia que queda expuesta enseguida: Márquez, de 40 años, ya fue "probada" en las urnas, porque fue rival de Petro en las interconsultas de marzo y logró unos 785.000 votos, y puede además mostrar además su militancia ambientalista y feminista, mientras que Castillo, de 53 años, hace su primera incursión en política.
En un país en el que cerca del 10% de la población es negra o tiene ese origen, las mujeres negras ocupan sin embargo apenas un lugar en el gabinete y dos bancas del Congreso, entre casi 300 miembros.
Participante de los diálogos de paz con las FARC, distinguida con varios premios internacionales, Márquez apareció como una de las sorpresas del proceso electoral y, después de algunas dudas, Petro la eligió como su compañera de binomio.
Castillo, ingeniera, licenciada en Biología y Química, magíster en Administración y Gestión de Empresas y doctora en Educación, llegó a la fórmula después de que la periodista Paola Ochoa –una polémica columnista radial de posturas conservadoras- aceptara y desistiera en apenas días ocupar ese lugar detrás de Hernández.