UNA PROBLEMÁTICA DE SALUD PÚBLICA
Sin responsable en el área de Veterinaria, preocupa el freno en el programa de castraciones masivas
Las proteccionistas de Gualeguaychú comenzaron a organizarse ante la falta de respuestas del Municipio. Aseguran que la semana pasada les prometieron designar a una persona a cargo del área, pero a un mes de la asunción del Intendente, aún no hay quien ocupe el cargo. Perras y gatas en celo y la manutención de los refugios cada vez más cara.
Por Mónica Farabello
En Gualeguaychú rige la ordenanza de equilibrio poblacional que prevé un plan de castraciones masivo, sostenido en el tiempo y gratuito. Según los estudiosos de la materia, es la única manera en que ciudades argentinas han logrado contener el avance indiscriminado de perros y gatos en situación de calle.
No se trata sólo de una problemática “de los proteccionistas”, sino de la toda la sociedad; un alerta en la salud pública que afecta con mayor virulencia a los niños. Perros y gatos defecando en espacios públicos, peleas callejeras y hasta accidentes de tránsito, son solo algunas de las consecuencias.
EL ARGENTINO conversó con un grupo de proteccionistas que contaron que la semana pasada se reunieron con referentes del Municipio y les prometieron que iban a tener novedades respecto de la vuelta al programa de castraciones.
“Nos dijeron que íbamos a tener novedades de quién iba a estar a cargo del área porque todavía no hay nadie; y la verdad que no hay novedades. A nosotros no nos dan respuesta. Tenemos el teléfono explotado de mensajes con pedidos de castraciones y no podemos dar respuestas”, alertaron.
En este sentido, fueron optimistas de conseguir fecha para castrar urgencias y adelantaron que organizarán una campaña. “A los pocos días de haber ganado Mauricio Davico desde la Red de Políticas Públicas le enviaron una carta para pedir una audiencia para conocer cómo seguía el programa y no se ha tenido ninguna respuesta”.
“Es un problema enorme y una pena grandísima que se desperdicie tanto sacrificio, trabajo y dinero; porque se está yendo al tacho todo lo que se había logrado por este freno en las castraciones”, alertaron.
Además, aseguraron que comienza a incumplirse el compromiso que se tomó con los integrantes de la Red de Políticas Públicas. “Estamos en una encrucijada realmente horrible y vemos que en dos meses vamos a empezar a ver cachorros por todos lados y esas son las consecuencias directas de no hacer nada hoy”, cerraron.
Patitas en alerta total
Por otra parte, EL ARGENTINO se contactó con Coqui Carbó, quien alertó por el enorme incremento del alimento balanceado y las dificultades para mantener el refugio activo.
Después de 20 años de trabajo, este espacio podría cerrar sus puertas porque necesitan de millón de pesos sólo para el alimento. Ante esta situación, lanzaron una campaña de adopción responsable.
En su red social expresaron que “sin encontrar salida a la angustiante situación económica que nos toca vivir, decidimos impulsar una campaña de adopción responsable masiva para los perritos del refugio. No podemos sostener lo básico que es su alimentación diaria. En realidad el proveedor no nos niega los pedidos, pero no podemos seguir aumentando la deuda sabiendo cuáles son nuestros ingresos posibles (esta semana llegamos casi al medio millón de pesos de deuda), más allá de las ferias, socios, colaboraciones y donaciones, no le encontramos la vuelta y creemos es lo mejor para ellos que puedan vivir cuidados y amados los años que les quedan de vida”.
Actualmente, Patitas cobija a 102 perritos, más algunos de la zona que comen allí. Se usan 3 bolsas de 20 kg por día, más algunos con su alimento especial. Si sabés de alguien que está transitando el duelo por no tener más su perrito o perrita, si sabés de alguien que necesita un compañero en su vida háganle saber que en el refugio muchos amores de 4 patas necesitan ese hogar”.
Las preocupaciones y lo que se viene
“Este martes tenemos una reunión con el Secretario de Desarrollo Humano, Juan IgnacioOlano, donde le vamos a plantear que nosotros cobramos un subsidio para la comida por 48 mil pesos. Queremos saber qué va a pasar y plantearle toda esta temática que nos tiene muy preocupados”, dijo Coqui Carbó.
En el mismo sentido, destacó que “se ha avanzado como sociedad en cuanto a la tenencia responsable y el cuidado de los animales, aunque nos queda otra situación, que es la de haber podido avanzar en el trabajo entre el Estado y el privado; entre el municipio y los proteccionistas, porque hace 20 años atrás estaba únicamente Patitas, pero ahora somos muchos y esta es una problemática de la sociedad”.
En Patitas se encuentran con deudas dado que el alimento balanceado ha sido uno de los rubros que más ha aumentado en las últimas semanas. Esta misma situación también fue planteada a Ivana Zecca del área de Ambiente, por lo cual los funcionarios están al tanto, aunque hasta el momento no hay ningún responsable en Veterinaria.
Finalmente, se sumó al pedido de emergencia por las castraciones y detalló que “se firmó el convenio y se habían empezado a castrar. El objetivo era de 45 animales por día en Gualeguaychú. Esta es la cifra mínima para que en dos años podamos ver los resultados. Ahora, si podemos castrar 60 o 50, mucho mejor y el tiempo se nos acorta. Es decir, vamos a empezar a ver los beneficios mucho antes que dos años. ¿Qué significa esto? Que ante cada nuevo nacimiento haya un hogar que cobije a ese animal, haya un lugar donde ese animal pueda estar. Esa va a ser la única solución posible a todo esto”, concluyó.
La ordenanza vigente
Es la 12803 del 2023 que hace referencia a la problemática de la sobrepoblación de perros y gatos afecta a toda la comunidad.
“El Municipio de San José de Gualeguaychú protege la vida de los animales, previene los actos de crueldad y maltrato, controla su salubridad y su reproducción con métodos éticos, transformándose la Sala de Veterinaria Municipal en el Centro Municipal de Salud Animal y Zoonosis. El Municipio es independiente de cualquier otra institución en el ejercicio de las funciones que le son propias en materia de sanidad animal y salud pública”, comienza el texto.
Además, esta norma prohíbe “al Estado la práctica de matanzas por cualquier método, la eutanasia y el sacrificio de perros y gatos” y declara como “único método ético y eficiente para el control del crecimiento poblacional de perros y gatos, la práctica de la castración quirúrgica gratuita, masiva, no excluyente, sistemática, extendida y temprana de machos y hembras, de especie canina y felina”.
“Para el control de la reproducción de perros y gatos, se desarrollarán y ejecutarán los planes que tendrán como objetivo efectuar castraciones quirúrgicas en forma masiva, no excluyente, sistemática, temprana, gratuita y extendida, con el fin de lograr un adecuado control poblacional y lograr la equiparación de la cantidad de dichos animales con los hogares disponibles”, dice otro artículo, a la vez que se prohíbe la construcción de “perreras” con el fin de amontonar animales sin buenos cuidados.