Jóvenes gualeguaychuenses instalaron dos “libroderas”para intercambiar libros

Interact es un voluntariado patrocinado por  Rotary Club, y está compuesto por jóvenes  entre 12 y 18 años que desarrollan habilidades de liderazgo y generan impactos positivos dentro de la comunidad. Entre las actividades que realizan se encuentran la protección y limpieza de espacios verdes y la promoción cultural, en este caso, a través del acercamiento de la literatura con la iniciativa de las “libroderas”.

Las “libroderas” son heladeras viejas, sin uso, que los adolescentes que forman parte de Interact restauraron para convertir en bibliotecas al paso. A partir de las  donaciones de libros que recibieron lograron equiparon dos heladeras. Una se encuentra ubicada en el Café 909  en Urquiza 909 y la otra, instalada recientemente, en el Bar del Frigorífico.

La primera “librodera”  de la ciudad fue inaugurada el 26 de enero de este año, es pequeña y de un color naranja rojizo. Se puede tener acceso a ella entrando al café de Urquiza 909. Antes de poder instalar la heladera, los jóvenes tuvieron que restaurarla, limpiarla y pintarla. A través de las redes sociales del voluntariado invitaron a las personas a colaborar y donar libros para el proyecto.

Pero, ¿cómo se usan estas bibliotecas al paso? La forma de proceder es muy sencilla, los interesados pueden acercarse a las “libroderas”, seleccionar el libro que más les guste y llevarlo a casa con el compromiso de, una vez leído, devolverlo o pueden llevarse un libro e intercambiarlo por uno de su propiedad. Esta última opción garantiza el recambio de títulos de forma dinámica y contribuye al componente sorpresa: no siempre te vas a topar con los mismos ejemplares.

La segunda librodera de la ciudad fue instalada en el Bar del Frigorífico el domingo pasado. Entre los títulos que se pueden encontrar figura Rayuela de Julio Cortázar. En la publicación en redes sociales, los voluntarios de Interact escribieron “Finalmente hicimos la entrega de la segunda librodera. Está disponible en el bar del frigorífico para cualquiera que quiera hacer uso de ella, leyendo las obras propuestas o intercambiando”.

El proyecto de las libroderas, impulsado por los voluntarios de Interact Gualeguaychú, se enmarca dentro del fenómeno de las bibliotecas al paso, que cada vez gana más presencia en el país. Provincias como Buenos Aires, Jujuy, Santa Fe, La Pampa y Mendoza cuentan en diferentes barrios con estas bibliotecas. Algunas de ellas están hechas con heladeras recicladas, como en el caso local, y otras están construidas con maderas restauradas y se las pueden encontrar en diversidad de tamaños y formas. Por lo general, están ubicadas en la vía pública. La iniciativa tiene el objetivo de compartir libros con sentido comunitario y fomentar la lectura. Es una excelente oportunidad para que las personas tengan acceso a la literatura y generen un sentido de pertenencia al cuidar y contribuir con el mantenimiento de estos espacios.

En la actualidad, los jóvenes de Interact se encuentran trabajando en un proyecto denominadoplogging, una iniciativa nacida en Suecia que combina deportes, como puede ser el running, y el cuidado del medio ambiente.