ABIERTO A TODA LA COMUNIDAD
El Teatro Gualeguaychú celebra sus 110 años con danza y músico de todos los tiempos
Este sábado 15 de junio, a las 20 horas, se realizará el festejo por un nuevo aniversario del Teatro. Habrá danza, lírica, murga, tango y rock. La entrada es libre y gratuita.
La subsecretaría de Cultura, Deportes y Juventud, organiza un espectáculo con la actuación de artistas locales en diferentes estilos.
Con motivo de cumplirse este 11 de junio, 110 años de su inauguración en 1914, este sábado 15 de junio, a las 20 horas, se celebrará el aniversario del Teatro Gualeguaychú, uno de los Monumentos históricos nacionales que tenemos en nuestra ciudad.
En este espectáculo, se brindará un recorrido artístico por las diferentes disciplinas que han formado parte del Teatro en la larga trayectoria de su escenario.
Estarán presentes: La Academia de Danzas Nina Fuentes con un fragmento de su obra “Frozen”.
El cantante lirico Gabriel Hernández
La Murga Tradicional “Los Cocoliches”.
El grupo “Dos trovadores”, acompañados de Cielo Pereyra y Gustavo Peretti, de la Compañía de Danza “Cadencia”.
La cantante local Dora Van Haller.
El grupo de rock “Secta de Reos”.
El Dúo musical de Tango “Jorgelina y Alejandro”, acompañados por la pareja de bailarines Ingrid Iregui y Fleco Rivas.
La conducción estará a cargo de Juan Schroll.
La invitación está destinada a toda la ciudad. La entrada es por orden de llegada hasta completar la sala.
El Teatro Gualeguaychú fue fundado el 11 de junio de 1914 por un grupo de vecinos. Desde el 22 de diciembre del año 1994 es administrado por la Municipalidad de Gualeguaychú. En 1997 fue declarado Monumento Histórico Nacional.
Tiene planta en herradura, rodeada por una fila de palcos bajos, una fila de cazuela y otra de tertulia. Mantiene un rígido eje de simetría y cuenta con foso para orquesta. Tiene capacidad para 600 personas distribuidas en 382 plateas con palcos bajos incluidos y 218 en cazuela incluyendo palcos de plata alta.
Su fachada es simétrica, plana y elegante, con balcones de balaustres y herrería, predominando en el conjunto la sobriedad formal con cierta severidad. Su arquitectura está más cerca de la corriente conocida como “Secesión vienesa”.
El 9 de abril de 2011 se reinauguró con importantes refacciones en el marco de su recuperación histórica y en 2018 se habilitaron los camarines restaurados.