.
Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino: cómo prevenirlo
Cada 26 de marzo se celebra el Día Mundial de la Prevención del Cáncer de Cuello Uterino con el objetivo de concientizar a todas las mujeres de la importancia de prevenir la aparición de esta enfermedad.
El VPH es un virus muy común y la mayoría de las personas lo tendrán en algún momento de sus vidas.
En la gran mayoría de los casos las infecciones causadas por el VPH son controladas por el sistema inmune evitando el desarrollo de las lesiones en el cuello del útero.
Se estima que sólo alrededor del 5% de las infecciones por VPH permanece en el cuerpo, transformándose en infecciones persistentes y pudiendo causar alguna lesión. En esos casos, es posible tratarlas y evitar el desarrollo del tumor.
En este sentido, desde el Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Centenario se posibilita a las mujeres de 30 a 64 años hacerse el test de tamizaje de VPH y de esta manera prevenir el cáncer de cuello de útero.
El test del Virus del Papiloma Humano (VPH) es un examen para detectar la presencia del mismo en material obtenido de la mucosa del cuello uterino.
Este virus lo que provoca es la infección de las células epiteliales del tracto genital inferior, favoreciendo la aparición de lesiones precancerosas. Hay virus de alto riesgo que aumentan las posibilidades de transformación en cáncer de estas células y otros de bajo riesgo asociados con la producción de verrugas benignas.
Las infecciones de bajo riesgo son frecuentes en mujeres jóvenes, por lo que el test se recomienda a partir de los 30 años.
Cuando se detecta la presencia del VPH se informa como test positivo y se complementa con la lectura del Papanicolaou (PAP), por ello se toma una muestra doble: una para el test y otra para el PAP.
El PAP puede mostrar lesión en cuyo caso se realiza colposcopía y biopsia y eventualmente se trata para evitar la progresión a cáncer. Además, puede dar una idea del estado hormonal de la mujer y detectar infecciones genitales, diagnosticarlas y favorecer un tratamiento eficaz.
En cambio, si el test VPH positivo se acompaña de un PAP negativo, se realiza un nuevo control a los 18 meses. Y si el test VPH es negativo, se vuelve a realizar un nuevo test recién a los 5 años.
El tiempo de transformación en cáncer de una infección por VPH suele ser prolongado, por lo que un control periódico tanto con PAP como con test VPH o ambos puede detectar las lesiones precancerosas a tiempo y evitar su progresión a cáncer.
Al respecto, la Dra. Laura Cavaignac, coordinadora del Programa de Cáncer de Cuello de Útero en Gualeguaychú e integrante del Servicio de Anatomía Patológica del Hospital Centenario, comentó que a partir del año pasado en Entre Ríos se comenzó a utilizar el test de tamizaje de VPH.
Las ventajas de este test es que de alta sensibilidad (95%); tiene alto valor predictivo negativo y posibilita espaciar el intervalo del tamizaje; y es de lectura automatizada.
“El programa está orientado para mujeres de 30 a 64 años, a las demás se les hace directamente PAP”, detalló la Bioquímica, y recalcó que “lo más importante es que si da negativo el test se realiza nuevamente a los 5 años, y si da positivo se hace el PAP y se realiza el seguimiento correspondiente”.
“El objetivo es que todas las mujeres estén testeadas y se pueda prevenir el cáncer de cuello de útero”, destacó, y comentó que “recibimos todas las muestras que llegan de la ciudad y del departamento, y luego son enviadas a Paraná donde se procesan, y luego se suben al sistema nacional y quedan registrados si son positivos o negativos”.
Además, la especialista adelantó que “en un futuro va a haber un sistema central para que las personas queden registradas, y les llegue por mensaje cuándo tengan que volver a realizarse el test o el PAP”.
Dato
La Organización Mundial de la Salud presentó la Estrategia Mundial para Acelerar la Eliminación del Cáncer de Cuello Uterino. Un hito histórico, ya que es la primera vez que 194 países se comprometen a eliminar un tipo de cáncer, siendo Argentina, parte de este desafío.