Las Cantoras de Eurindia o el tributo a la memoria sonora
Eurindia es una palabra-concepto creado por Ricardo Rojas, quien concibió a una tierra imaginaria que uniera y vinculara a los cruces culturales entre Europa y América. Eurindia es la historia misma de cuando el mundo deja de ser pequeño y chato, para pasar a ser grande y redondo.
Las Cantoras de Eurindia es un trío vocal formado por tres mujeres: Delfina López, Silvina Simón y Lilia Moyano.
Radicadas en Colón, a orillas del Río de los Pájaros, ellas recrean el concepto integrador por medio de los cantos ancestrales de América que llegan a través de todos los tiempos, incluso del porvenir.
Su sonoridad, nacida de los latidos de esos vientres que palpitan vida, fue escuchada y aclamada en ambos continentes. Y en esas dos orillas abismales, las Cantoras de Eurindia se convirtieron en puentes, ya no de dos tierras, sino de múltiples formas de entender la vida.
Los pueblos milenarios con sus sones acunando a sus hijos, los cantos que imitan el misterio del monte, los que replican el silencio sideral de las estrellas, aquellos ritmos que les tributan a la tierra, al paisaje, a la memoria, a los dioses y a los sentimientos vestidos en sus más íntimos y sutiles ropajes: la alegría, la tristeza, el amor, la esperanza.
Nacidas para unir y vincular, las Cantoras se conocieron en Colón, fue un día en que el silencio ya no pudo ser guardado y se hizo canción.
Las Cantoras de Eurindia le aportan a los cantos ancestrales, arreglos vocales contemporáneos que permiten el encuentro entre las melodías de la América milenaria y la actualidad, tomando lo mejor de las técnicas compositivas de Europa y como de América.
Además, los instrumentos de percusión que utilizan pertenecen a diferentes culturas del mundo y danzan al compás de esos ritmos.
Su trabajo de investigación y respeto por la pluriculturalidad les otorgó varios reconocimientos nacionales e internacionales como la Mención Especial y Primer Premio en la II y III Bienal Intercontinental de Arte Indígena de Ecuador, Grupo Revelación Musical de la Provincia de Entre Ríos, y en el Proyecto Aqcuarium de Cerdeña, Italia.
Desde el año 2008 vienen ofreciendo numerosos conciertos en Argentina, Uruguay, Ecuador e Italia.
El Teatro Sucre de Ecuador; los conciertos por la paz, la hermandad y en salvaguarda del planeta en Italia; el Teatro Florencio Sánchez de Paysandú, Uruguay; las actuaciones a través del Fondo Nacional de Las Artes en Buenos Aires; o en el Teatro México, entre otros escenarios le permitieron corroborar a las Cantoras de Eurindia que es posible pensar en un mundo mejor desde el arte.
Así como el hombre mora en un paisaje y al mismo tiempo hay un paisaje que habita al hombre, las Cantoras de Eurindia alojan un repertorio y tienen un repertorio que las anida.
Pareciera que a las canciones las eligen, pero en verdad son las canciones quienes eligen a sus cantoras. Es que llevar este arte a los propios pueblos originarios sea en Ecuador o en Cerdeña, en los Andes o en el Viejo Continente, es devolver –a manera de gratitud- la sensación única de sentirse parte de una misma tierra.
Respetar una fonética, pero también una forma de narrar; respetar un ritmo pero también adaptarlo a la actualidad, hace de Eurindia ese nexo donde se amalgama –luego de una búsqueda que se hace encuentro- lo antiguo con lo nuevo.
“Debutamos en Colón en 2008 en la Biblioteca Popular Fiat Lux y desde entonces nunca hemos dejado de actuar”, dicen casi a coro estas mujeres que son convocadas en distintas latitudes para compartir su arte. “Viajar por estos escenarios no es fácil, por eso siempre agradecemos a los organizadores de los festivales que nos invitan, al gobierno de Entre Ríos que siempre está dispuesto a darnos una mano y fundamentalmente a nuestros seres queridos que se bancan la ausencia”, coinciden estas Cantoras que desde Entre Ríos salen al mundo para mostrar a esa América que no siempre ha ido valorada como corresponde.
“Hacemos lo que hacemos porque la historia que nos enseñaron en la escuela no nos habló de esta América tan inmensa como fecunda. Nos dimos cuenta que nos habían negado una identidad”, reflexionan.
“Ahora en marzo nos queremos ir a México, dado que hemos sido invitadas a participar del festival Cumbre Tajín, en Veracruz y se trata de un encuentro cultural de expresiones indígenas de todo el mundo”, relata Moyano acerca de los planes inmediatos que también incluye otros festivales en Canadá para medianos de año. “Especialmente el gran festival de Montreal”, aclara.
También este trío de mujeres está pensando con incorporar a dos músicos de Paysandú (Willian Amarillo y Osvaldo Sanguinet) que aportarían en percusión y cuerdas. “Pero fundamentalmente nos seduce esto de reconocernos como un solo modelo cultural en la región. El río nos une, lo mismo que la cultura”, aclaran las Cantoras.
La propuesta descansa en los cantos ancestrales de América, que pese a ser milenarios, también son desconocidos en las grandes ciudades. Por eso, escuchar a las Cantoras de Eurindia es comprender algo que jamás se aprenderán en todos los libros de los teóricos. Escuchar a las Cantoras de Eurindia es saber lo que dicen todas las canciones.
Por Nahuel Maciel
EL ARGENTINO ©
Radicadas en Colón, a orillas del Río de los Pájaros, ellas recrean el concepto integrador por medio de los cantos ancestrales de América que llegan a través de todos los tiempos, incluso del porvenir.
Su sonoridad, nacida de los latidos de esos vientres que palpitan vida, fue escuchada y aclamada en ambos continentes. Y en esas dos orillas abismales, las Cantoras de Eurindia se convirtieron en puentes, ya no de dos tierras, sino de múltiples formas de entender la vida.
Los pueblos milenarios con sus sones acunando a sus hijos, los cantos que imitan el misterio del monte, los que replican el silencio sideral de las estrellas, aquellos ritmos que les tributan a la tierra, al paisaje, a la memoria, a los dioses y a los sentimientos vestidos en sus más íntimos y sutiles ropajes: la alegría, la tristeza, el amor, la esperanza.
Nacidas para unir y vincular, las Cantoras se conocieron en Colón, fue un día en que el silencio ya no pudo ser guardado y se hizo canción.
Las Cantoras de Eurindia le aportan a los cantos ancestrales, arreglos vocales contemporáneos que permiten el encuentro entre las melodías de la América milenaria y la actualidad, tomando lo mejor de las técnicas compositivas de Europa y como de América.
Además, los instrumentos de percusión que utilizan pertenecen a diferentes culturas del mundo y danzan al compás de esos ritmos.
Su trabajo de investigación y respeto por la pluriculturalidad les otorgó varios reconocimientos nacionales e internacionales como la Mención Especial y Primer Premio en la II y III Bienal Intercontinental de Arte Indígena de Ecuador, Grupo Revelación Musical de la Provincia de Entre Ríos, y en el Proyecto Aqcuarium de Cerdeña, Italia.
Desde el año 2008 vienen ofreciendo numerosos conciertos en Argentina, Uruguay, Ecuador e Italia.
El Teatro Sucre de Ecuador; los conciertos por la paz, la hermandad y en salvaguarda del planeta en Italia; el Teatro Florencio Sánchez de Paysandú, Uruguay; las actuaciones a través del Fondo Nacional de Las Artes en Buenos Aires; o en el Teatro México, entre otros escenarios le permitieron corroborar a las Cantoras de Eurindia que es posible pensar en un mundo mejor desde el arte.
Así como el hombre mora en un paisaje y al mismo tiempo hay un paisaje que habita al hombre, las Cantoras de Eurindia alojan un repertorio y tienen un repertorio que las anida.
Pareciera que a las canciones las eligen, pero en verdad son las canciones quienes eligen a sus cantoras. Es que llevar este arte a los propios pueblos originarios sea en Ecuador o en Cerdeña, en los Andes o en el Viejo Continente, es devolver –a manera de gratitud- la sensación única de sentirse parte de una misma tierra.
Respetar una fonética, pero también una forma de narrar; respetar un ritmo pero también adaptarlo a la actualidad, hace de Eurindia ese nexo donde se amalgama –luego de una búsqueda que se hace encuentro- lo antiguo con lo nuevo.
“Debutamos en Colón en 2008 en la Biblioteca Popular Fiat Lux y desde entonces nunca hemos dejado de actuar”, dicen casi a coro estas mujeres que son convocadas en distintas latitudes para compartir su arte. “Viajar por estos escenarios no es fácil, por eso siempre agradecemos a los organizadores de los festivales que nos invitan, al gobierno de Entre Ríos que siempre está dispuesto a darnos una mano y fundamentalmente a nuestros seres queridos que se bancan la ausencia”, coinciden estas Cantoras que desde Entre Ríos salen al mundo para mostrar a esa América que no siempre ha ido valorada como corresponde.
“Hacemos lo que hacemos porque la historia que nos enseñaron en la escuela no nos habló de esta América tan inmensa como fecunda. Nos dimos cuenta que nos habían negado una identidad”, reflexionan.
“Ahora en marzo nos queremos ir a México, dado que hemos sido invitadas a participar del festival Cumbre Tajín, en Veracruz y se trata de un encuentro cultural de expresiones indígenas de todo el mundo”, relata Moyano acerca de los planes inmediatos que también incluye otros festivales en Canadá para medianos de año. “Especialmente el gran festival de Montreal”, aclara.
También este trío de mujeres está pensando con incorporar a dos músicos de Paysandú (Willian Amarillo y Osvaldo Sanguinet) que aportarían en percusión y cuerdas. “Pero fundamentalmente nos seduce esto de reconocernos como un solo modelo cultural en la región. El río nos une, lo mismo que la cultura”, aclaran las Cantoras.
La propuesta descansa en los cantos ancestrales de América, que pese a ser milenarios, también son desconocidos en las grandes ciudades. Por eso, escuchar a las Cantoras de Eurindia es comprender algo que jamás se aprenderán en todos los libros de los teóricos. Escuchar a las Cantoras de Eurindia es saber lo que dicen todas las canciones.
Por Nahuel Maciel
EL ARGENTINO ©
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