Asignatura para el futuro
Desde que se recuperó la democracia los argentinos hablamos de nuestro derecho a votar y de vez en cuando, de nuestra obligación de hacerlo.
Y en general, se olvida que esta obligación implica que nos interesemos por las distintas propuestas, que sepamos no sólo en qué escuela y mesa tendremos que sufragar, sino y desde hace un tiempo, buscar en la consulta del padrón el número de orden que se nos ha adjudicado para emitir el voto.
Esto se implementó para agilizar la actividad y colaborar con el trabajo de las autoridades de mesa.
Pero no se lo tiene en cuenta, porque no se sabe de su existencia y entonces comienza el peregrinar del que hablamos antes.
Y si bien para las elecciones de ayer se dispusieron en las columnas de los patios de escuela o sobre cualquier soporte que los hiciera bien visibles, junto a las mesas de votación, estos afiches del Registro nacional de electores, con el padrón definitivo al 25 de abril de 2017, fueron muy pocos los que pudieron responder a la pregunta “¿qué número de orden tiene?”
Y es una pena, porque los afiches que se exhibían incluían, además de los apellidos que integraban el listado de votantes de la mesa en cuestión, varias casillas con información útil para la ciudadanía.
En la primera, se exhibía el número de orden, en la siguientes el apellido y nombre de la persona, el número del documento y en la última el tipo de éste (DNI original, duplicado, etc.) y pese a su presencia, hubo muchos ciudadanos que iban de mesa en mesa preguntando, como ya dijimos, dónde les correspondía votar.
Es decir que faltó docencia en este sentido y ya no de parte de los partidos y frentes políticos, sino del organismo nacional encargado de explicar a la ciudadanía aspectos elementales para la consumación del sufragio.
Docencia y comunicación que pudo hacerse con una pauta publicitaria de mensajes a emitirse por los medios masivos, que también podría haber incluido la información de que estaría, junto a las mesas de sufragio, esta información.
Porque si no se sabía qué número de orden era el propio, tampoco se supo que estarían a disposición estos afiches para que todos pudiéramos buscarnos en su registro.
Esta es una asignatura pendiente para las elecciones de 2019. Y lo es para todos: para presentarnos a votar portando el documento legal y con conocimiento del número de la orden que nos corresponde.
Que propende a una mejor organización, en beneficio de todos.
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