En Argentina mueren 21 personas por día en accidentes de tránsito
En Argentina mueren 21 personas por día en accidentes de tránsito, por lo que -en el marco del Día Mundial de las Víctimas de Tránsito que se conmemoró ayer- los especialistas insisten en el control y la prevención para intentar minimizar la inseguridad vial, que en los últimos 20 años se cobró las vidas de más de 150 mil ciudadanos.
Desde la Asociación Civil Luchemos por la Vida hicieron hincapié en la falta de decisión por parte de las autoridades, a las que apuntaron por el curioso hecho de que nuestro país sea uno de los pocos en los que este flagelo no desciende, alcanzando los 7.472 decesos en 2015. De esas muertes, 2.322 pertenecen a la Provincia de Buenos Aires, siendo por lejos el distrito más afectado.
El presidente de Luchemos por la Vida, Alberto Silveira, explicó en el Diario Popular que: “Esta es la primera causa de muertes en menores de 35 años y la tercera entre todas las edades, sólo por detrás del cáncer y enfermedades cardiovasculares”, por lo que pidió que el Estado haga “lo necesario para que estas muertes evitables no sigan repitiéndose”.
“En los últimos 25 años, países como Suecia (63 por ciento), Holanda (59 por ciento) y Estados Unidos (27 por ciento) han reducido notablemente sus números. También uno de idiosincrasia muy parecida como España (81 por ciento). En cambio, en Argentina no pudimos bajar nada”, insistió Silveira.
Y detalló que esto se debe a que “no hay una política de seguridad vial que priorice que haya controles eficaces en las calles y rutas y sanciones efectivas, como se aplicaron en otros países para cambiar las conductas”.
Al respecto, el especialista alertó: “Acabar con la impunidad es un tema nodal. Acá se violan semáforos, se conduce alcoholizado, se exceden los límites de velocidad, casi no se usan los cascos y los cinturones de seguridad se usan muy poco”.
Por eso, sostuvo que se debe “concientizar a la gente a través del bolsillo” y criticó la actitud de los argentinos al afirmar que “todos piensan que las medidas son buenas, pero no cuando son para uno, porque cuando llega una multa se hace lo imposible para no pagarla”.
“No existen las sanciones. Las actas que se labran son ínfimas. Muy pocas en proporción a la cantidad de infracciones que se cometen. Además, la mayoría que se cobran se dan cuando los coches son vendidos o robados, cuando se exige el certificado de libre deuda. Y ya para esa altura la persona ni se acuerda de lo que hizo”, cuestionó Silveira.
Reclamos
Entre las medidas que Luchemos por la Vida exige como políticas de Estado están, además del control eficaz en calles y rutas y la necesidad de sanciones efectivas para los infractores, la preparación seria y otorgamiento responsable de licencias de conducir; la educación vial sistemática y continua en las escuelas; y una planificación urbana, con inversiones que permitan el tránsito fluido y ordenado.
“Siempre estamos haciendo propuestas, pero pareciera que a los políticos esto no les interesa mucho, como si no fuera uno de los problemas que realmente causan estragos en la población”, se lamentó el titular de la Asociación Civil.
Ante la inacción estatal, Silveira apuntó a la responsabilidad ciudadana. “La clave es siempre cumplir a rajatabla con las leyes: usar el cinturón de seguridad siempre, adelante y atrás; tener a los chicos en sus sillitas especiales; utilizar casco en todo vehículo de dos ruedas; respetar la velocidad y la señalización. Además de reducir los riesgos y no asumirlos de manera innecesaria, sea de día o de noche”, destacó.
En el marco de esta jornada de reflexión, instó a que “todos tomemos conciencia que el tránsito, en mayor o menor medida, lo hacemos entre todos y todos tenemos responsabilidades que asumir”.
“Los peatones cruzando por las esquinas y con el semáforo a favor; motos y bicis usando el casco y dando la prioridad a los peatones. Como conductores de vehículos y particularmente los profesionales, que son el ejemplo de lo que no hay que hacer. Hablo de choferes de taxis, remises, colectivos y camiones”, apuntó Silveira.
En ese sentido, concluyó: “Es importante que asumamos cada uno nuestra responsabilidad teniendo en cuenta que, aunque creamos que nunca va a ocurrir, cuando menos lo pensamos ahí ocurren los accidentes. Por eso son importantes las medidas de prevención, para evitar el accidente o para que, si ocurre, los daños sean mucho menores”.
Las motos y los fines de semana
De las estadísticas de Luchemos por la Vida se desprende que los conductores de motos son los que aportan un mayor número a las víctimas del tránsito, con un 39 por ciento, en buena medida por la no utilización del casco.
Con respecto a los fallecidos en accidentes, completan el relevamiento los conductores u ocupantes de autos (32 por ciento), peatones (22 por ciento), ciclistas (seis por ciento) y otros (uno por ciento).
En tanto, los fines de semana resultan más peligrosos que los días hábiles: durante sábado y domingo se producen el 44 por ciento de los accidentes fatales, mientras que de lunes a viernes se da el 56 por ciento, una diferencia notable para comparar un ciclo de dos días contra un ciclo de cinco.
Al hablar de la edad, se registró que cinco de cada diez fallecidos son menores. Entre las víctimas, el seis por ciento tiene entre 0 y 12 años; el 11 por ciento entre 13 y 19; el 15 por ciento entre 20 y 24; el 24 por ciento entre 25 y 34; el 26 por ciento entre 35 y 60; y el 18 por ciento más de 60 años.
“Muere más gente por accidentes
que a manos de delincuentes”
Desde Luchemos por la Vida manifestaron que, a pesar de que el número de víctimas fatales es mayor con la inseguridad vial, la inseguridad delictiva está en agenda, mientras que la vial parece invisibilizada por la población.
“Tenemos un altísimo índice de inseguridad delictiva, pero así y todo muere mucha más gente por accidentes que a manos de los delincuentes. Tenemos un problema de inseguridad vial gravísimo”, apuntó el presidente de la Asociación Civil, Alberto Silveira.
Y añadió: “Se habla todo el día de lo delictivo, pero esto también requiere políticas adecuadas por parte de las autoridades para terminar con este flagelo”.
Consultado por las situaciones en que ambas problemáticas tienen un conflicto de intereses, como cuando un chofer pasa de largo un semáforo en horas de la noche para evitar robos, el especialista advirtió: “Es difícil parar en rojo a la noche, pero debería intervenir la autoridad. Si no pueden cumplir con esta misión esencial, debería estar titilante en amarillo”.
“Porque si no lo que pasa es que uno de un lado se manda con verde y de repente viene otro que no para por los delitos y tienen un choque feroz”, insistió.
MICROTEXTO CIFRAS
39 Por ciento de los fallecidos por siniestros viales son conductores de motos. Especialmente los fines de semana.
32 Por ciento de los fallecidos por siniestros viales son conductores u ocupantes de automóviles. Generalmente por no usar cinturón de seguridad.
22 Por ciento de los fallecidos en siniestros viales son peatones. La lista se completa con los ciclistas (seis por ciento) y otros (uno por ciento).
El presidente de Luchemos por la Vida, Alberto Silveira, explicó en el Diario Popular que: “Esta es la primera causa de muertes en menores de 35 años y la tercera entre todas las edades, sólo por detrás del cáncer y enfermedades cardiovasculares”, por lo que pidió que el Estado haga “lo necesario para que estas muertes evitables no sigan repitiéndose”.
“En los últimos 25 años, países como Suecia (63 por ciento), Holanda (59 por ciento) y Estados Unidos (27 por ciento) han reducido notablemente sus números. También uno de idiosincrasia muy parecida como España (81 por ciento). En cambio, en Argentina no pudimos bajar nada”, insistió Silveira.
Y detalló que esto se debe a que “no hay una política de seguridad vial que priorice que haya controles eficaces en las calles y rutas y sanciones efectivas, como se aplicaron en otros países para cambiar las conductas”.
Al respecto, el especialista alertó: “Acabar con la impunidad es un tema nodal. Acá se violan semáforos, se conduce alcoholizado, se exceden los límites de velocidad, casi no se usan los cascos y los cinturones de seguridad se usan muy poco”.
Por eso, sostuvo que se debe “concientizar a la gente a través del bolsillo” y criticó la actitud de los argentinos al afirmar que “todos piensan que las medidas son buenas, pero no cuando son para uno, porque cuando llega una multa se hace lo imposible para no pagarla”.
“No existen las sanciones. Las actas que se labran son ínfimas. Muy pocas en proporción a la cantidad de infracciones que se cometen. Además, la mayoría que se cobran se dan cuando los coches son vendidos o robados, cuando se exige el certificado de libre deuda. Y ya para esa altura la persona ni se acuerda de lo que hizo”, cuestionó Silveira.
Reclamos
Entre las medidas que Luchemos por la Vida exige como políticas de Estado están, además del control eficaz en calles y rutas y la necesidad de sanciones efectivas para los infractores, la preparación seria y otorgamiento responsable de licencias de conducir; la educación vial sistemática y continua en las escuelas; y una planificación urbana, con inversiones que permitan el tránsito fluido y ordenado.
“Siempre estamos haciendo propuestas, pero pareciera que a los políticos esto no les interesa mucho, como si no fuera uno de los problemas que realmente causan estragos en la población”, se lamentó el titular de la Asociación Civil.
Ante la inacción estatal, Silveira apuntó a la responsabilidad ciudadana. “La clave es siempre cumplir a rajatabla con las leyes: usar el cinturón de seguridad siempre, adelante y atrás; tener a los chicos en sus sillitas especiales; utilizar casco en todo vehículo de dos ruedas; respetar la velocidad y la señalización. Además de reducir los riesgos y no asumirlos de manera innecesaria, sea de día o de noche”, destacó.
En el marco de esta jornada de reflexión, instó a que “todos tomemos conciencia que el tránsito, en mayor o menor medida, lo hacemos entre todos y todos tenemos responsabilidades que asumir”.
“Los peatones cruzando por las esquinas y con el semáforo a favor; motos y bicis usando el casco y dando la prioridad a los peatones. Como conductores de vehículos y particularmente los profesionales, que son el ejemplo de lo que no hay que hacer. Hablo de choferes de taxis, remises, colectivos y camiones”, apuntó Silveira.
En ese sentido, concluyó: “Es importante que asumamos cada uno nuestra responsabilidad teniendo en cuenta que, aunque creamos que nunca va a ocurrir, cuando menos lo pensamos ahí ocurren los accidentes. Por eso son importantes las medidas de prevención, para evitar el accidente o para que, si ocurre, los daños sean mucho menores”.
Las motos y los fines de semana
De las estadísticas de Luchemos por la Vida se desprende que los conductores de motos son los que aportan un mayor número a las víctimas del tránsito, con un 39 por ciento, en buena medida por la no utilización del casco.
Con respecto a los fallecidos en accidentes, completan el relevamiento los conductores u ocupantes de autos (32 por ciento), peatones (22 por ciento), ciclistas (seis por ciento) y otros (uno por ciento).
En tanto, los fines de semana resultan más peligrosos que los días hábiles: durante sábado y domingo se producen el 44 por ciento de los accidentes fatales, mientras que de lunes a viernes se da el 56 por ciento, una diferencia notable para comparar un ciclo de dos días contra un ciclo de cinco.
Al hablar de la edad, se registró que cinco de cada diez fallecidos son menores. Entre las víctimas, el seis por ciento tiene entre 0 y 12 años; el 11 por ciento entre 13 y 19; el 15 por ciento entre 20 y 24; el 24 por ciento entre 25 y 34; el 26 por ciento entre 35 y 60; y el 18 por ciento más de 60 años.
“Muere más gente por accidentes
que a manos de delincuentes”
Desde Luchemos por la Vida manifestaron que, a pesar de que el número de víctimas fatales es mayor con la inseguridad vial, la inseguridad delictiva está en agenda, mientras que la vial parece invisibilizada por la población.
“Tenemos un altísimo índice de inseguridad delictiva, pero así y todo muere mucha más gente por accidentes que a manos de los delincuentes. Tenemos un problema de inseguridad vial gravísimo”, apuntó el presidente de la Asociación Civil, Alberto Silveira.
Y añadió: “Se habla todo el día de lo delictivo, pero esto también requiere políticas adecuadas por parte de las autoridades para terminar con este flagelo”.
Consultado por las situaciones en que ambas problemáticas tienen un conflicto de intereses, como cuando un chofer pasa de largo un semáforo en horas de la noche para evitar robos, el especialista advirtió: “Es difícil parar en rojo a la noche, pero debería intervenir la autoridad. Si no pueden cumplir con esta misión esencial, debería estar titilante en amarillo”.
“Porque si no lo que pasa es que uno de un lado se manda con verde y de repente viene otro que no para por los delitos y tienen un choque feroz”, insistió.
MICROTEXTO CIFRAS
39 Por ciento de los fallecidos por siniestros viales son conductores de motos. Especialmente los fines de semana.
32 Por ciento de los fallecidos por siniestros viales son conductores u ocupantes de automóviles. Generalmente por no usar cinturón de seguridad.
22 Por ciento de los fallecidos en siniestros viales son peatones. La lista se completa con los ciclistas (seis por ciento) y otros (uno por ciento).
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