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Diario El Argentinoviernes 29 de marzo de 2024
Policiales

Causa Gustavo Rivas: la octava audiencia tuvo como clave el informe de los peritos

Causa Gustavo Rivas: la octava audiencia tuvo como clave el informe de los peritos

Por Nahuel Maciel

EL ARGENTINO

Se desarrolló ayer la octava audiencia en el juicio oral (no público) en el que está imputado el abogado e historiador Gustavo Rivas por graves delitos contemplados en los Artículos 125° y 125° Bis del Código Penal, esto es, promoción a la corrupción y promoción a la prostitución de menores de 18 años, de forma reiterada, respectivamente y que se corrobora en la carátula de la causa N° J/454.

El Tribunal de Juicios y Apelaciones de Gualeguaychú e Islas del Ibicuy está integrado por los jueces Alicia Vivian (quien lleva adelante la dirección del debate), y los vocales Arturo Exequiel Dumón y Mauricio Derudi; mientras que el Ministerio Público Fiscal estará representado por los fiscales Lisandro Béhéran (en su carácter de coordinador general) y Martina Cedrés, quien llevó adelante la Investigación Penal Preparatoria (IPP); mientras que la querella es ejercida por los abogados Alfredo Vitale y Estela Esnaola; en tanto que la defensa de Rivas la ejerce el abogado Raúl Eduardo Jurado.

En la audiencia de ayer –la octava de las quince previstas por la Oficina de Gestión de Audiencias (OGA)-, declararon cuatro personas, pero lo esencial estuvo vinculado con la ratificación de los informes de las pericias psiquiátricas y psicológicas que aportaron el doctor Simón Ghiglione (médico psiquiatra y perito médico forense oficial) y la licenciada en Psicología, Andrea Ezcurra.

El Tribunal articuló un bozal para las partes, lo que torna imposible acceder a lo que ocurre dentro de la sala. No obstante, se sabe desde la elevación a juicio que el informe de los peritos vinculados con la salud mental (la Justicia nunca autorizó –casi a manera de protección- un peritaje físico al imputado, como suele hacer normalmente en distintas causas) fue categórico tanto para llevar a juicio oral a Gustavo Rivas como para comprender su conducta obsesionada sexualmente con adolescentes y en pleno desarrollo.

En ese marco se sabe –desde la elevación a juicio- que los peritos evaluaron que la personalidad de Rivas sería compatible con los hechos denunciados. Incluso destacaron que se estaría frente a una personalidad de rasgos perversos, relacionada al momento del desarrollo de la libido, y por eso volvería de manera recurrente o permanente a esa instancia. Además, que para él todo lo vinculado con lo sexual es genital, es decir, no le interesa o no busca un intercambio con el otro, salvo convertirlo en objeto para calmar o saciar su apetito sexual.

Por eso no le habría importaba con quién tenía un acto sexual, sino que ese acto se consumara sí o sí y casi siempre sin tener límite alguno. Además de tener una compulsión a protagonizar esta práctica como algo serial, o una experiencia a la que siempre debe volver casi de la misma manera; apenas diferenciada en algunos rituales según la pertenencia social de los menores.

Rivas, que en el momento de los hechos era un reconocido educador, vulneraba a sus víctimas de 14 años promedio a través del alcohol. Práctica que no mereció ningún comentario del mundo educativo, curiosamente, en el marco de este secreto a voces que se había instalado en la comunidad de Gualeguaychú.

¿Cómo un educador les daba alcohol a menores de 14 años, para luego promover la corrupción de ellos? Muchos lo sabían, pero como fue recurrente en esta historia: todos lo callaron.

Este trastorno del desarrollo que señalaron los especialistas, es lo que motivaba siempre a repetir esa experiencia y en esa repetición se convirtió en un depredador sexual serial, teniendo como víctimas siempre a adolescentes varones.

Las pruebas

A este juicio la Fiscalía aportó casi 80 testigos, entre ellos dirigentes de instituciones de la comunidad, educativas, tutelares y de clubes, entre otras.

Además, aportó variados informes documentales de instituciones que reconocen al imputado Rivas como dirigente o participante de muchas de esas entidades.

Aproximadamente veinte informes periciales realizados por expertos en salud mental, tanto de los peritajes a denunciantes como al propio Rivas.

Pruebas materiales como una voluminosa carpeta conteniendo más de 200 fotografías, diapositivas y filmaciones de menores de edad en situación acorde de sexo explícito y que fuera denunciado por ellos. Y pruebas ilustrativas, es decir, inspecciones policiales y judiciales de los lugares donde se realizaban estos atroces hechos, como así también elementos secuestrados y que están relacionados con la denuncia y que son reveladores del interior de los lugares donde Rivas reunía a sus víctimas.

FOCO

¿Cómo sigue? Hoy será la última audiencia de esta semana y el Tribunal ordenará un cuarto intermedio hasta el lunes, jornada que tal vez sea la última para los testigos de la parte acusadora. Luego, según el cronograma previsto, quedarían dos días para los testigos de la defensa, aunque se sabe que la dinámica del juicio podría extenderse en más audiencias.

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