Gurí: “el arte es mi herramienta de lucha”
Elige la libertad, el arte callejero, “porque si lo hiciera puertas adentro, sería como un pájaro en encierro”, dijo Gurí, el artista que nos ha acostumbrado a sus dibujos, sus colores.
“Empecé despacito, hace siete años”, contó para recordar que fue en La Plata donde conoció gente que arrancaba con el arte en la calle, que después trajo a Gualeguaychú.
“Hoy hay muchas pinturas mías, pero llevó su tiempo y van desapareciendo porque el arte callejero es efímero. Los factores naturales hacen que la pintura se degrade”.
También el mercado inmobiliario, le dijimos y él aseguró “donde desaparece una, pinto dos, tres. Intento estar activo, porque sé que lo que pinto hoy en un tiempo desaparece, pero lo importante es lo que queda en la conciencia de la gente”.
No le gusta que se conozca su nombre, su edad, nada que anteponga su persona a su obra. Tampoco apunta a pintar “lindo” y ser reconocido por esto.
“Pinto para decir algo, manifestar lo que está pasando, luchar por una causa. Es un arte social que combina estética, color y contenido. Pienso el arte como una herramienta que tengo para luchar por causas sociales, para hacer el bien a alguien, transmitir una emoción... En La Plata me nutrí de este movimiento cuando comenzaba en Argentina y entendí el poder que tiene. No hago arte de salón, sino que voy al barrio y ¿quién va a pagar?”, expresó y aquí podemos contar de sus figuras en escuelas, lugares icónicos de los barrios, el frente del Hogar de ancianos, la galería de entrada, “donde se sientan los abuelos a charlar, a mirar para afuera...”
También, que Gurí estará presente en la Marcha al puente dándole vida al viejo colectivo de Arroyo Verde que fue símbolo en la ruta.
“Mi protesta sería pintar”, nos dijo y vale decir que también es suyo el arte que ilustra los afiches de la marcha de este 29 de abril.
- ¿Te molesta que la gente vaya a mirarte trabajar?
“No, para nada. Que venga a compartir un momento, un mate, no me molesta. Sí que se acerque para sacarse una foto, hacerse una foto.
-Cómo se te ocurrió pintar el frente del Hogar de ancianos?
“Lo hicimos con Vientos de cambio, que está trabajando por el Hogar. Me hablaron, hubo donaciones y de a poquito se juntó para hacer el frente. Estuvimos una semana pintando, con amigos y ayudantes que colaboraron, porque había que mover andamios, alcanzar un mate, algún elemento que quedó abajo..., y teniendo quien dé una mano es más fácil”.
Ya se dijo que lo suyo es el arte callejero y que lo descubrió en La Plata. Ahora hay que agregar que lo alimenta estudiando la gráfica, la mitología, la cosmovisión y simbología de los pueblos originarios de Latinoamérica en una recorrida por Colombia, Venezuela, México, Guatemala, Brasil, desde hace tres años.
Pero no se apropia de los símbolos de estas culturas, como han hecho firmas que han sido denunciadas por usarlos como elementos de moda.
“Me molesta porque los sacan de su lugar y los banalizan”, se quejó. “En Guatemala, los tejidos son increíbles y marcas de primer nivel en el mundo han tomado sus diseños sin retribuirles y lo que es peor, vaciándolos de contenido”.
“En cada zona donde fui a estudiar dejé mi arte respetando esa raíz. Y acá no vengo a pintarla, aunque es claro que la estética te queda en el registro”, dejó en claro.
Tan claro como que no quiere fotos y que si aceptó la entrevista fue “porque entendí que esto me sirve para tirar mi mensaje, siempre anteponiendo el arte a mi persona”.
“El arte en la calle que hago viene a decir algo. No quiero ponerme delante. Creo que para demostrar algo, hay que hacer. Trabajo así y se genera algo más lindo, porque la gente ve la pintura, no sabe quién la hizo y se produce el contacto entre la persona y la obra, que ya no es mía, sino de la calle”.
También reivindica su Gurí, “porque es de acá y lo tomo como identidad. Además, puede ser cualquiera. Y porque quiero seguir teniendo ese espíritu del niño, del gurí.
Tomo a la pintura como un juego, pero es mi juego más serio”, dijo seguro.
“Y activo todo el tiempo”, agregó. No puedo quedarme quieto. La pintura es una acción que habla sin palabras”.
Al despedirse, compartió que estará en Gualeguaychú hasta junio o julio, cuando marchará rumbo a Nicaragua, Costa Rica y Panamá, porque viajar me ha hecho crecer”.
Mientras, podemos encontrarlo sobre un andamio o seguirlo en instagram @guri.arte y en su muro de facebook guri arte
Vale el intento porque con su arte, Gurí crea conciencia.
Por: S.E.
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