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Planean retomar la búsqueda de los restos de Francisco Ramírez
En base a datos recolectados por el historiador Rubén Bourlot en una investigación desarrollada entre 1998 y 1999, se planea retomar la búsqueda de los restos de Francisco Ramírez. Es en el marco de las acciones propuestas por la comisión que encabeza el ex gobernador Jorge Busti para reivindicar la figura del Supremo Entrerriano, con motivo de cumplirse el año que viene el bicentenario de su muerte.
Ramírez murió el 10 de julio de 1821 a ocho kilómetros de San Francisco Viejo, en la provincia de Córdoba. Las tropas diezmadas que conducía el Supremo Entrerriano fueron alcanzadas por las fuerzas combinadas de Santa Fe y Córdoba. El cruce se produjo en la mañana de ese día y se prolongó hasta la puesta de Sol. Con 200 hombres, el general entrerriano trató de escapar hacia el Norte para llegar a Santiago del Estero, pero los enemigos atraparon a La Delfina, su inseparable compañera, consignó El Diario de Paraná.
“Notando la prisión de su adorada, Ramírez dio vuelta su caballo y, blandiendo la lanza, cayó como un tigre sobre sus enemigos. El capitán Maldonado disparó sobre Ramírez un pistoletazo a quemarropa. Cayó el general sobre el pescuezo de su caballo que, asustado por la algazara, disparó dando por tierra con su jinete, que rodó exánime envuelta la cabeza por los pliegos de su poncho. Su cabeza fue cortada por el soldado Pedraza”, reconstruyó el historiador santafesino Ramón S. Lassaga.
Trofeo
“El cuerpo presuntamente fue abandonado en el campo de batalla y la cabeza fue tomada como trofeo de guerra. Estanislao López la envió a Santa Fe para que fuera exhibida en un lugar público. Existe constancia de que el suegro de López, el protomédico Manuel Rodríguez, le practicó un tratamiento para preservarla y así poder presentarla en público. Hasta aquí lo consignado por la documentación oficial disponible”, indica Bourlot en su investigación, que fue financiada por el Consejo Federal de Inversiones (CFI).
Una versión sostiene que la cabeza de Ramírez fue enterrada en el interior de la Iglesia de la Merced, hoy denominada Nuestra Señora de los Milagros, en coincidencia con una costumbre arraigada hasta entrado el siglo XIX. Con el objeto de corroborar esta hipótesis, se practicó un estudio mediante prospección geoeléctrica que determinó la existencia de indicios de huecos en el subsuelo del patio adyacente de la iglesia, debajo del piso del presbiterio y de la sacristía.
Desde ese punto partirá la siguiente etapa investigativa que se pretende emprender, otra vez con financiamiento del CFI, que se encuentra analizando el proyecto correspondiente, publicó El Diario.
Tecnología
“El paso siguiente a las pruebas de prospección eléctrica era realizar una excavación, pero finalmente no se hizo. El lugar es complejo porque habría que perforar en el piso de la sacristía y la iglesia es monumento histórico nacional”, explicó Bourlot a El Diario.
Contó que ahora, en el marco de las acciones por el bicentenario de la muerte de Ramírez impulsadas por Busti y motorizadas por una comisión con apoyo del Gobierno provincial, se evalúa la posibilidad de hacer estudios con tecnología que antes no estaba disponible. Puntualmente, apuntan a trabajar con un equipo de geo radar, que se usa en grandes obras y determina las características del suelo a dos o tres metros de profundidad.
“Esta tecnología brinda en forma instantánea en una pantalla una imagen precisa del suelo”, detalló el historiador. Contó que la arqueóloga Maia Rodríguez, que trabaja en al Museo Antonio Serrano, fue la encargada de confeccionar el proyecto presentado ante el CFI y de contactar a quienes cuentan con ese equipamiento en una empresa constructora de Paraná y otras de fuera de la provincia.
“Si se encuentra algo compatible con esta hipótesis, en una etapa siguiente podría hacerse una exploración cuidadosa, quitando una baldosa y realizando una perforación para analizar el suelo y determinar si tiene componentes compatibles con restos óseos”, explicó Bourlot.
En caso de producirse el hallazgo, en el proyecto están incluidas tareas de preservación y un cotejo de ADN con familiares de Ramírez, entre ellos su madre, Tadea Jordán, sepultada en el cementerio de Concepción del Uruguay.
Una acción dentro de un proyecto amplio
El ex gobernador Jorge Busti, quien en su primer gobierno logró traer a la provincia los restos de otro caudillo, Ricardo López Jordán, impulsa ahora el proyecto que, entre muchas otras acciones, incluye reanudar la búsqueda de la cabeza de Ramírez.
En julio el ex mandatario le presentó su proyecto al gobernador Gustavo Bordet, junto a una comisión integrada por el profesor Bourlot, Flavia Martínez Aquino, Gonzalo García Garro y Víctor Prigioni.
“En 2020 se cumplirán 200 años de la Batalla de Cepeda, del Tratado del Pilar, de la República de Entre Ríos y de la batalla de Las Tunas, y en 2021 van a hacer 200 años del fallecimiento de Ramírez”, enmarcó.
La propuesta logró buena receptividad por parte de Bordet, quien impulsó la correspondiente declaración de interés provincial y habilitó la gestión de los fondos ante el CFI, que está en trámite. Busti también logró el apoyo y la colaboración del intendente de Concepción del Uruguay, Martín Oliva; y de su antecesor, el ex vicegobernador José Lauritto. Esa ciudad está pensada como destino final de los restos, si es que finalmente se produce el hallazgo.
“Esta búsqueda es una acción más dentro del proyecto, que apunta al objetivo de rememorar la figura de Ramírez que, por diversos motivos, fue desconocida por la historia oficial”, comentó Busti a El Diario.
“Ni en París debe haber un monumento a Napoleón tan grande como el monumento a Urquiza en Paraná. Y de Ramírez, si bien tiene una calle, no hay ni siquiera un busto en la capital provincial”, graficó el ex mandatario, al tiempo que anticipó que ya conversó con el intendente Adán Bahl para emplazar un busto en alguna parte de la avenida que lleva el nombre del caudillo y rendir el correspondiente homenaje.
“La vida pública de Ramírez se desarrolló entre sus 24 y sus 35 años. Fue muy corta, pero dejó su impronta. Tanto por las batallas ganadas como por sus escritos sobre educación, igualdad, fraternidad, soberanía”, destacó Busti.
EN FOCO
Acciones. Las acciones por el bicentenario de la muerte de Ramírez incluyen la edición de libros, la publicación de un comic para chicos y la producción de obras artísticas, entre las que se destacan una cantata en la que está trabajando el músico uruguayense Atahualpa Puchulu y obras de teatro realizadas por elencos jóvenes en distintos puntos de la provincia.